Legislación y Noticias Argentina, 30 de abril de 2024
Si está registrado puede iniciar sesión o solicite suscripción para acceder a todos los
contenidos del Portal.

NUEVOS RETOS

"2021 será la antesala de la transformación para las áreas de Compliance"

Entrevista a Carlos Rozen, socio de BDO | El consultor detalla los principales desafíos que trajo 2020 para las organizaciones en materia de gestión de riesgos, incremento de fraudes y corrupción y transformación digital y anticipa cómo evolucionará la transformación iniciada a lo largo del nuevo año. | Redacción "Prevenciondelavado.com"


"Decir que el 2020 no ha sido un año sencillo ya luce como una frase hecha", señala en diálogo con Prevenciondelavado.com Carlos Rozen, socio de la consultora BDO en las prácticas de Governance, Risk & Compliance y Fraud Investigations & Disputes, quien asegura que el año que dejamos atrás en estos días ha sido lo más parecido a una "tormenta perfecta" para quienes hubieran soñado el posgrado práctico de compliance.

 

"Sucedió de todo y al mismo tiempo", resalta. Así fue como el contexto exigió un esfuerzo de transformación y controles consecuentes de las organizaciones. Claro que las más digitales, que ya tenían procesos internos optimizados, un nivel de automatización consecuente con sus necesidades y altos estándares de tecnología aplicada, fueron afectadas en menor medida que aquellas que debieron transformar sus rutinas para ser ejecutadas a distancia y se vieron en la necesidad de repensar sus riesgos y controles.

 

Los desafíos más relevantes

 

Esta situación inédita y tan compleja hizo que en BDO se enfrentara al desafío de atender una cantidad inusitada de consultas y pedidos de colaboración a lo largo de este año. Y, según pudo observar Rozen, los 3 temas más relevantes que desafiaron a las áreas de Compliance en este 2020 han sido:

 

1) GESTIÓN DE RIESGOS: Explica que el inventario de riesgos y sus controles asociados deben revisarse a intervalos definidos y cada vez que ocurre algún hecho importante o cambio significativo, como por ejemplo el cambio de un gobierno, el lanzamiento de un nuevo producto o servicio, una reorganización empresaria y una novedad tecnológica trascendente, entre otras circunstancias. "Además de que todo esto se haya dado, la pandemia potenció esta necesidad de reasegurar que los riesgos relevantes estuvieran identificados y gestionados y que los mitigantes existieran y operaran con efectividad", señala el consultor.

 

2) INCREMENTO DEL FRAUDE Y LA CORRUPCIÓN: Numerosos estudios demuestran que estos ilícitos se disparan en períodos de crisis hasta en un 50% más. "Si analizamos la corrupción entre sectores público y privado, podemos advertir que la pandemia trajo un efecto más peligroso que la misma enfermedad: la corrupción bajo formas escandalosas", resalta Rozen. 

 

3) TRANSFORMACIÓN DIGITAL Y TRABAJO A DISTANCIA: El experto comenta que, hasta 2019, se observaba un crecimiento importante en el uso de tecnología en las compañías, pero que 2020 registró en un año el avance que se hubiese dado en materia de adopción tecnológica y explica que "la necesidad de operar a distancia, en algunos casos de manera total y en otros parcial, produjo cambios en el uso de medios de pago, autorizaciones de todo tipo en forma no presencial y modificó los procesos que la dinámica del trabajo remoto se ocupó de materializar".

 

Según Rozen, en este tipo de situaciones, los controles suelen resentirse y no son fáciles de reactivar y destaca que las áreas de Compliance han tenido una batalla interesante en este sentido. "Por ejemplo, me tocó participar de una discusión en uno de nuestros clientes que incremento del 200% de las donaciones y tenían un proceso mediante el cual se conformaba un legajo manual autorizándose en presencia, luego de realizar la debida diligencia del potencial receptor del beneficio", comenta. 

 

Lo que traerá el año nuevo

 

Luego de todo este proceso que describe, Rozen mira a 2021 y anticipa que será "la antesala de la transformación de las áreas y funciones de Compliance" y asegura que se trata de un proceso que será motorizado por imperiosa necesidad.

 

Así, prevé que es probable que las áreas de compliance no crezcan en headcount (cantidad de integrantes) sino que lo harán en eficiencia y eficacia. "Esto implica que se valorará el cabal cumplimiento de las actividades planeadas utilizando recursos razonables", resalta.

 

De este modo, según Rozen, la Inteligencia Artificial será la tecnología que marcará el rumbo en actividades tales como investigaciones forenses; Big Data y Analytics, lo hará en el manejo de información de grandes volúmenes; así como se potenciará el monitoreo continuo mediante el manejo de tablas de diferentes sistemas con aplicación de business Intelligence y las actividades de compliance se potenciarán con tecnologías de sistemas de gestión.

 

En tanto que las tareas de background checks (controles internos) y due diligences (debida diligencia) se realizarán de manera más automatizada, incluyendo el uso de tecnología de RPA (automatización robótica de procesos) y chatbots para responder a consultas sobre el Código y las Políticas corporativas.

 

Para Rozen, esas serán sólo algunas de las novedades tecnológicas que vendrán en un contexto en el que la estrategia conocida como "learning by doing" (aprender haciendo) e "inteligencia lúdica" se perfilan como los dispositivos más efectivos para transmitir conocimientos, pero mejor aún, para modelar comportamientos.

 

Y es que, tal como lo subraya el experto, "la Gestión del Cambio constituirá una disciplina inseparable del Compliance toda vez que las organizaciones vayan comprendiendo que el verdadero cliente es la propia organización y no el regulador".

 

Redacción "Prevenciondelavado.com"