AMENAZA DEL CRIMEN ORGANIZADO

La investigación de la corrupción y del narcotráfico son las principales causas de asesinatos de periodistas

Informe de Instituto Internacional de Prensa | El trabajo alerta que América Latina es uno de los campos de asesinatos más grandes, donde los periodistas que cubren el narcotráfico y la corrupción política son particularmente vulnerables. En promedio son asesinados 8 periodistas por mes. | 08/05/2018

Es casi un lugar común decir que la corrupción y el narcotráfico matan, pero no deja de ser un dato importante que resalta la necesidad de combatir este tipo de delitos cada vez con mayor fuerza, sobre todo, cuando los datos de la realidad lo confirman con números, nombres y cifras contundentes, como en este caso. Y es que la investigación de casos de corrupción es una de las principales causas de asesinatos de periodistas en los últimos 12 meses, según informó el Instituto de Prensa Internacional (IPI, por sus siglas en inglés), una red mundial de editores, periodistas y ejecutivos de medios de comunicación, en el "Observatorio de la Muerte", trabajo que se dio a conocer el pasado 2/05/18, con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa.

Allí alertaron que América Latina se ha convertido en uno de los campos de asesinatos más grandes, donde los periodistas que cubren el narcotráfico y la corrupción política son particularmente vulnerables.  "México se ha convertido en el lugar más mortal del mundo para trabajar en los medios", advirtió el instituto.

En esta línea reportaron que, el año pasado, 88 periodistas -entre ellos seis mujeres- fueron asesinados en todo el mundo y que, de ese total, 46 fueron asesinados en ataques dirigidos, en la mayoría de los casos porque estaban investigando y exponiendo la corrupción. En tanto, se informó que -solo en los primeros cuatro meses de 2018- un total de 33 periodistas fueron asesinados, lo que hace un promedio de casi 8 muertes al mes.

Un dato relevante del IPI es que, hasta 1.801 periodistas han muerto en el cumplimiento del deber desde 1997 y destacaron que el año más sangriento de las últimas dos décadas fue 2012, cuando 133 periodistas perdieron la vida.

"El asesinato de un periodista sigue siendo la forma más brutal y efectiva de silenciar las noticias", dijo la directora ejecutiva del IPI, Bárbara Trionfi. Y agregó que "las personas tienen derecho a saber lo que está sucediendo a su alrededor y los periodistas, ya sea que cubran la corrupción o denuncien desde zonas de conflicto, arrojan luz sobre esa información".

Finalmente, señaló que esta situación es una amenaza para la democracia y aseguró que "a menos que los gobiernos tomen medidas firmes y demuestren que no habrá impunidad, los periodistas seguirán siendo blanco de amenazas, torturas y asesinatos".

María del Pilar Wolffelt

"Opinión y Noticias"